El curso de perfeccionamiento de lengua asturiana para adultos, que ayer comenzó en el Palacio de Valdecarzana, contará con 16 alumnos. «Es un número muy considerable», aseguraba la responsable de la Estaya de la Llingua del Ayuntamiento de Avilés, Montse Machicado, que además hará las veces de profesora.
El curso tiene 30 horas de duración y se prolongará hasta el próximo 29 de noviembre. El objetivo es que los alumnos se adentren «en cuestiones gramaticales», aunque las primeras sesiones serán, básicamente, «para repasar lo aprendido anteriormente», indicó Machicado. Porque todos los alumnos han participado en algún curso similar previo, aunque no todos a través del Ayuntamiento. «Hablaremos de los verbos irregulares, los pronombres exclamativos…» y también habrá un hueco para «la literatura en asturiano», con la que comenzarán a través de una introducción a los textos clásicos.
La primera sesión, a la que no pudieron acudir todos los alumnos, fue de reencuentro con participantes en otros cursos, porque más o menos Machicado los conocía a todos. Y el objetivo era el mismo para los estudiantes: «para practicar un poco» y tener con quien hablar. Al final, todos los estudiantes de una lengua buscan otros compañeros con los que poner en práctica lo aprendido. En esa línea hablaba Xose Francisco. «Vengo para seguir aprendiendo, empecé hace años y lo fui dejando, luego lo retomé…», resumía antes de la clase.
Acude «para hablar con la gente y conocer a otras personas que compartan mis mismas inquietudes». Además, es lector habitual de literatura en asturiano, y cree que «leo y entiendo mejor de lo que hablo, porque me parece complicado».
La avilesina Verónica González está acostumbrada a hablar en asturiano con su familia, «desde siempre», aunque acude «para seguir practicando con otras personas». Indicó que «me gustaría que fuese cooficial, para poder utilizarlo más», y explicó que recibe clases «desde que voy al colegio». Durante el curso quiere «aprender a escribir el normativo».
Al igual que ella, Ángeles Méndez, de Pola de Allande pero residente en Avilés, habla «asturiano del occidente» y cree que el nivel de perfeccionamiento «es incluso más difícil que el de iniciación, como la escritura, porque para mí hablado es más natural». Aunque ahora tienen días para practicar.
(d’El Comercio, 10-10-2012)
Deixar ua Respuosta