P. M.
El Festival de Cine ha cambiado este año dos de sus ciclos más veteranos de nombre. El que antes se denominaba Esbilla ahora es Gran Angular y el que se conocía como Llendes, será, a partir de la inminente edición 51, Límites. Es decir, desaparece su nomenclatura asturiana en favor del castellano. La explicación es bien sencilla para el responsable del certamen: «No pretendemos entrar en una cuestión de lenguaje asturiano o no asturiano, solo queríamos que el nombre determinara con más acierto lo que encierra el ciclo. La única intención era definir perfectamente los contenidos».
Dicho lo cual, Carballo añadió que «fuera de Asturias nadie entiende lo que significa ‘llendes’, por ejemplo, y creímos más sencillo poner un término que todo el mundo conociera, como ‘límites’». Hablaba así el director del FICX ante la atenta mirada del concejal de Cultura, acérrimo defensor de la lengua vernácula regional, por lo que se vio en la obligación de valorar el cambio y su respuesta fue escueta: «Esta es la más clara demostración de que yo no intervengo para nada».
En realidad, el trabajo se reparte entre un equipo que, a decir de Carballo, supera «estos días» con mucho las cien personas y cuya dirección depende «en términos artísticos», en palabras de Rubiera, del propio Carballo y, «en términos ejecutivos o de gerencia», de Teresa Sánchez, responsable del Teatro Jovellanos. «Uno es el globo que se quiere elevar de la Tierra y la otra la cuerda, elástica, eso sí, que le mantiene asido al suelo», explicó el concejal de Cultura utilizando un símil cinematográfico del mismísimo Fellini.
Ambos cuentan este año con un presupuesto de 950.000 euros, de los que «unos 400.000 se van en sueldos», tanto del personal fijo del Teatro Jovellanos que trabaja directamente con el Festival, como de colaboradores eventuales que se suman temporalmente a la causa.
Con lo que resta, se programan las más de 200 películas, los encuentros con directores y actores, los homenajes a Hong Sang-Soo y Jean Françoise Laguionie. Y también las exposiciones. La dedicada a Pipo Fernández, en el Palacio Revillagigedo, que responde a la colaboración y patrocinio de Cajastur, ayer representada por Carlos Señeriz de Paz, y la de Jirí Trnka, que se celebrará en el Antiguo Instituto.
(d’El Comercio, 08-11-2013)
Diz que «fuera de Asturias nadie entiende lo que significa ‘llendes’». Hai qu’añidir que dientro namás los del bable usen “llendes” con esi sentíu. Lo que pasa ye que, como en toles sectes, acaben convencíos de que lo d’ellos ye lo normal.
Ta-yos de puta madre.