A. VILLACORTA
Siete meses le llevó al filólogo Pablo Suárez (Udrión-Trubia, 1973) la traducción inicial al asturiano de ‘La Celestina’. Una primera aproximación que luego tuvo que pulir durante varios meses más y cuyo resultado final, editado por Laria, presentó ayer en el Real Instituto de Estudios Asturianos (Ridea) acompañado por Cristina Valdés, directora general de Universidades y autora del prólogo; Xosé Antón González Riaño, presidente de la Academia de la Llingua Asturiana, y Juan Carrio, de la editorial Laria.
Suárez -licenciado en Ingeniería Superior de Telecomunicaciones, en Matemáticas y en Filología Hispánica, doctor en Filología y especialista en Filología Asturiana- emprendió esta tarea titánica movido por un profundo amor a la literatura medieval y postmedieval que ya le había llevado a traducir antes al asturiano otras dos cumbres de las letras españolas: ‘El Quijote’ y ‘El Lazarillo de Tormes’.